miércoles, 25 de mayo de 2011

Cuentito

Anna Molly
Por Marco Sarmiento

Anna despertó horrorizada, su propio grito pareció sacarla de un inquietante y profundo estado aletargado. Por cuarta vez en una semana lograba conciliar el sueño, tan solo para perderlo en las garras de la misma pesadilla recurrente que creía haber superado hacía un par de décadas.

Era una mujer que a pesar de su corta edad contaba con una larga experiencia en la soledad, su más reciente fracaso se había dado justo dos meses antes, en el momento en que su esposo decidió desaparecer dejándola esperando el bello atardecer prometido a la orilla del mar.

Tomó el frasco de Valium de la cómoda para bajar un poco el ansia que empezaba a manifestarse. Odiaba ese estado en el que justo después de despertar, su mente la empieza a engañar; recuerda vagamente secciones sobrepuestas y confusas de ese sueño que le provoca tanta infelicidad, que solo acentúa su gran soledad.

Se encuentra en un desierto, la arena bajo sus pies comienza a llagarlos y el calor abrazador le provoca heridas que poco a poco convierten su piel en algo parecido a un papiro antiguo; justo en el momento en el que la desesperación comienza a abordarla el ambiente cambia, todo se empieza a tornar húmedo y refrescante, camina tratando de apagar el escozor en su carne.

Llega a un valle formado por enormes dunas en el que se ve correr un pequeño hilillo de agua, se acerca a él y este empieza a aumentar en volumen al grado de transformarse en un enorme torrente que se vierte sobre ella, a su alrededor, extrañamente sin tocarla siquiera.

El agua comienza a subir de nivel y se genera un enorme torbellino en cuyo vórtice se encuentra Anna en una suerte de burbuja de aire, el tiempo se detiene por un instante, una eternidad; se escucha un tambor ancestral: grotesco, profundo y atemorizante. A través de la marejada que se encuentra a su alrededor logra distinguir la silueta de una mujer que flota fantasmagórica, una visión impresionante de sí misma flotando, atada al fondo de un mar ficticio.

El terror se apodera de su cuerpo, en un principio aparece como pequeños espasmos en sus piernas, el agua empieza a derramarse dentro de su cápsula protectora, es como si un vaso descomunal fuera llenado con agua corriente. Anna grita desesperada, no puede salir, dedica una mirada a su reflejo flotante y nota una grotesca sonrisa, ella solo recuerda, un nombre viene a su mente, ella lo pronuncia, lo grita de una forma desgarradora: Molly, ¡Molly! Anna despierta bañada en sudor.

La mañana llega y el sol entra por la ventana hiriendo los ojos de Anna que no se volvieron a cerrar durante toda la noche, el despertador suena desesperante y ella solo atina a desconectarlo directamente de la fuente de poder, se acerca al baño dispuesta a tomar una ducha; parece que después de todo volverá a llegar temprano a su oficina.

Llena la tina, se recuesta e intenta relajarse, el agua a su alrededor pareciera hervir y con un pequeño vaivén comienza a hundirse en el sopor del sueño, alguien susurra en su mente el nombre de Molly, piensa en ella un instante y se ve abruptamente interrumpida por el pitido del despertador.
Por un momento piensa que ya es tarde, luego recuerda que desconectó el aparato, un escalofrío recorre su cuerpo e inmediatamente corre hacia la recamara para confirmarlo, se detiene en el umbral de la puerta generando un charco de agua debajo de ella, ve su cuerpo tendido en la cama, de pronto, su Doppelgänger abre los ojos y por un instante cruzan la mirada, alcanza a notar que la Anna recostada, susurra el nombre que trepana su mente: Molly.

De nuevo su propio grito la despierta, esta vez está desnuda y completamente empapada; nota que el despertador sigue pitando enloquecido, lo arranca del buró y lo arroja lejos de la cama, este cae junto a la puerta del baño, justo sobre un enorme charco de agua.

Anna apresura un par de pastillas, está a punto de tener un colapso nervioso: se levanta como un autómata, toma un par de prendas, su bolso y sale a la calle, la oficina tendrá que esperar por hoy. Camina por la acera tratando de acomodar sus pensamientos, se siente observada y en cada peatón reconoce una posible amenaza. Por ello comienza a caminar hacia un desolado parque, los primeros rayos de la mañana atenúan un poco la persistente obscuridad que rodea el peligroso lugar.
Llega hasta un frondoso abeto, rendida y un poco sedada se sienta al pie para comenzar a llorar y por primera vez en el día maldecir su soledad. Sus lágrimas fluyen y al caer en la piel de su brazo provocan un cierto escalofrío, una incomodidad que le recuerda los espantosos sucesos de la mañana. Se arma de un poco de valor y trata de controlarse, se pregunta quién es Molly y por qué le recuerda tanto a ella misma.

Sin nadie a quién recurrir, decide ir a la vieja casa paterna, ahora abandonada. Aún recuerda cuando Edgar, su ex esposo, la ayudó a cubrir los muebles con sábanas y ordenar en el ático las pertenecías de sus padres: Anna, su madre, había cedido a los embates de una enfermedad devastadora mientras aún lloraba la pérdida de su amado Herb, fallecido veinte años antes durante una espantosa revuelta social.


Al llegar frente al jardín que la había visto crecer tan sola como se encontraba en este mismo instante, duda en entrar hasta que el recuerdo de un nombre la empuja sin antes revolverle un poco el estómago. Saca de su cartera la llave desgastada de la puerta principal, con un poco de esfuerzo logra librar el seguro y abrir, el marco cruje con un sonido casi de ultratumba que hace titubear por un momento a Anna.

Una vez adentro trata de ordenar sus pensamientos a pesar del fuerte olor a humedad provocado por el salitre que se ha ido comiendo lentamente el horrendo papel tapiz que a pesar de los años sigue jugándole malas pasadas a la vista. Descubre uno de los sillones y una gruesa capa de polvo nubla su visión y le provoca una molesta tos que pasa rápidamente, toma asiento y se lleva las manos al rostro pensando con qué podría aligerar la enorme carga emocional que le oprime el alma.

Recuerda un viejo álbum de recortes y fotografías que su madre solía presumir a todo aquél que osara traspasar el umbral de la casa. Espera encontrar alguna referencia al nombre que ya siquiera se atreve a pensar y mucho menos pronunciar. Sube al ático y comienza su labor, abre caja tras caja llena de polvo lastimándose aún más con los recuerdos de lo que por unos pocos años de su infancia fue una familia, encuentra objetos tan sensiblemente ligados a sus recuerdos que no nota siquiera que el llanto está humedeciendo su cara y se mezcla con la tierra aferrada a su rostro dándole un aspecto macabro.

Al fin encuentra el deseado álbum y pasa hoja por hoja esperando encontrar algo que la ayude a aliviar su dolor que ahora se mezcla con la nostalgia y una sensación de vacío mayor al que la atormenta cada tarde al notarse sola en su enorme oficina y tener que decidir entre trabajar toda la noche o ir a su casa a mirar el techo de su cuarto durante exactamente el mismo tiempo.

Encuentra una fotografía amarillenta en la que se ve junto a sus padres, todos sonríen y parecen realmente felices a pesar de todo, Anna tiene tan solo seis años y es cargada por su padre quien recién llegaba de una de tantas marchas y mítines en los que fungía como líder moral en la lucha constante por mejorar las condiciones de vida de obreros, estudiantes y ciudadanos en general. Su madre disfraza un poco la preocupación con la felicidad de tenerlo una noche más en casa, justo en la víspera del cumpleaños de su única hija.

Recuerda vagamente ese cumpleaños y una fiesta a la que solo dos compañeros de escuela asistieron, obligados por sus madres y la relación que llevaban con la familia. Además, ese fue exactamente el último cumpleaños que Herb disfrutó con ellas, puesto que dos días después cuando creía que al fin podría lograr un cambio, el ejército simplemente entró a las filas de una manifestación para acribillar a la multitud.

Desesperada e inundada en lágrimas empieza a destrozar el álbum al mismo tiempo que escucha que la lluvia comienza a caer. Agotada e hincada en medio de trozos de papel y fotografías desgarradas siente como si todo su cuerpo estuviera dentro de una licuadora industrial.

El espacio del ático parece cada vez más pequeño y la asfixia. La pequeña ventana circular que le proporcionaba un poco de luz, ahora se ve tan nublada como el cielo afuera de la casa. En un arranque de furia comienza a revolver las cajas, a estrellar contra las paredes los objetos que contienen sus recuerdos y toda una vida de sus padres ausentes y enfermos.

De una de las cajas, que Edgar había empacado fuertemente se asoma una más pequeña, una que recuerda bien, es dónde Herb solía guardar sus habanos, la toma entre sus manos y la aprieta contra su pecho, ahora recuerda vívidamente gracias al olor penetrante y afrutado del tabaco cubano.

Abre la pequeña caja y adentro encuentra una revolver calibre .38 Special, nunca lo había visto, al parecer su madre la atesoraba como oro puro. Cierra abruptamente la caja, decide bajar con una idea vaga pero con un propósito muy firme. La poca visibilidad hace que la preciada carga caiga por las escaleras, justo al golpear el último escalón escucha un estruendo, una detonación que por un instante la hace sumamente feliz, baja apresurada y recoge la caja. Dentro, el arma sigue humeante.

El hueco en la tapa deja ver la punta de lo que parece ser una fotografía, Anna la toma y recuerda al instante; la fiesta considerada como su primera decepción. En ella se logra ver a Anna sosteniendo una linda muñeca de trapo con vestimentas típicas del trópico, el último regalo de su padre.

Ella sonríe y de su garganta sale involuntariamente un nombre: Anna. Por un momento siente un escalofrío en todo el cuerpo, comienza a recordar, su padre no murió en la revuelta, ante la masacre regresó a casa y se pegó un tiro frente a su familia, sentado justo en el último escalón del ático, dos días antes su regalo de cumpleaños fue una muñeca que ella y su madre bautizaron con el nombre de Anna. Entonces, pensó, ¿quién soy yo?

Sin una identidad clara, sale de nuevo a la calle donde pareciera que se ha venido un nuevo diluvio, horrorizada corre hacia la avenida principal mientras cree tener alucinaciones de marejadas de agua cayendo de los edificios, al llegar a ellos el líquido comienza a danzar alrededor suyo, a formar una burbuja de protección, escucha de nuevo el tambor primordial y el tiempo se detiene, su figura reflejada en el agua pareciera flotar de nuevo y viene a ella el nombre maldito: Molly, Molly por favor despierta.

Esta vez el nombre es pronunciado por una voz masculina, logra reconocerla, es Edgar; él la llama y ahora lo sabe, Anna es solo una muñeca su verdadero nombre es Molly. Desesperada siente que el agua vuelve a rodearla y bajo su enorme peso no logra moverse más a pesar de escuchar su nombre dulcemente pronunciado por su marido.

Con dificultad y arrepentimiento Edgar suelta la mano de Molly y con lágrimas en los ojos se despide de ella, al parecer dos meses de coma profundo son suficiente razón para abandonarla a su suerte en el mismo hospital en el que recibieron una alarma al atardecer, una hermosa mujer tendida en un camastro con un frasco de pastillas en la mano y una botella de whiskey en la arena.

Edgar abandona la habitación lentamente y el sonido de sus pasos es paulatinamente reemplazado por el goteo del suero de Molly, goteo que será el único sonido que la acompañará durante el resto de la eternidad.

Y sí, el título es un tributo a Incubus.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Boletín informativo

Pues ahí les van las breves de mi vida en el los últimos diez meses.

Embaracé a mi novia.
Perdimos a nuestro bebé.
Volví a tocar el bajo.
Di unos pasos atrás en mi trabajo.
Di muchos pasos adelante en mi trabajo.
Chingón con mi familia.
Chingón con la familia de mi novia.
Renové mi contrato del depa.
Ya terminé de pagar mi Mac.
Me divorcié.
Sigo siendo sexy a madres.

Hasta hace algunos meses pensaba que mi separación y posterior divorcio era lo más doloroso que iba a enfrentar en mi vida... grave error. Perder un hijo y tener que hacer los servicios funerarios supera por mucho cualquier cosa que pueda llegar a tu mente, es simplemente antinatural. Aunque he de reconocer que deja buenas lecciones y fortalece lazos muy cabrones.

También he conocido la felicidad, cosa que anteriormente no me importaba. Realmente tuve un cambio de vida muy cabrón y descubrí que nunca fui tan feliz como lo soy hoy, a pesar de los altibajos.

Yo no quería ser feliz, de hecho no busco serlo, quería estar en paz y obtuve una recompensa adicional.

Lo cual no impide que me la pelen todos ustedes, claro.

lunes, 30 de noviembre de 2009

De cuando no tienes algo que hacer

Pues resulta que un día cualquiera como hoy pero de 1802 un famoso escritor danés, se preguntó ¿debería existir un adminículo (ah puto que buena palabra) para escribir en tiempo real y que miles de chismosos te lean y opinen cosas pendejas? ¿o con el papel nos basta?

Ese, aunque ficticio, es el principio básico sobre el que descansan adminículos (a que no la vieron venir esta vez) como las computadoras y utilidades como las redes sociales. Cuestiones de controversia harta en días recientes.

Pues resulta querido lector –sé que me está leyendo no se haga guey– que ahora para ser alguien en la vida, debes tener Facebook y Twitter, es más, para que una empresa dedicada a la venta de alfajores artesanales sea bien vista en el ramo de la venta de alfajores artesanales debe ser parte de dichas redes sociales cuando menos.

Un estudio reciente hecho por mí, demostró que de una muestra de 2’598,765 usuarios de Twitter, el 99.5 % no saben a ciencia cierta para qué sirve. Al dar un vistazo a Facebook la situación no resulta mucho más halagadora, ya que el 3.1416% de los usuarios EsCriBe AsÍ, lO QuE SóLO mE PrOVoCA dOLor dE CaBEza. El 98.5% en FM de usuarios de Facebook cuentan con contactos que jamás en la vida querrían platicar en vivo con ellos, y que cayeron en su perfil por las bondades de una buena foto tomada en picada sin perspectiva alguna.

En cuanto al Hi5, este está más muerto que Elvis.

La conclusión es, sin lugar a dudas, que yo soy alguien en la vida porque tengo Facebook y no permito que el número de contactos exceda los 50 porque el número de “amigos” en las redes sociales son inversamente proporcionales a la cantidad de neuronas activas en tu cerebro. Sigo pensando que Twitter no es un blog de 140 caracteres sino un lugarcito en la “internes” para poner lo mismo que en tu estado de Messenger para que lo lean tus amiguitos que te bloquearon pero que te siguen en secreto porque les gustas, o sea eres un placer culposo.

En otro orden de ideas, ando acedo porque ayer me la pase todo el día pachipedo y cené mucho.

martes, 24 de noviembre de 2009

Amor-Odio

Amo pagar mi renta, odio que me descuenten días de mi nómina, amo el Jack Daniels, odio que esté tan caro, amo escibri aquí, odio recordarlo hasta que me van a cortar el servicio de internet, amo esto: ¬¬, odio tener que dar 4 cliks para ponerlo en la mac, amo los fleamarkets, odio no comprar nada, amo mi trabajo, odio los conflictos, amo los cierres, odio que nadie más los ame, amo a Metallica, odio no tener varo para comprar el nuevo dvd, amo los torrents, odio que me gusten películas que sólo tienen otros dos gueyes, amo al Dodge Challenger, odio no poder manejarlo, amo las vacaciones, odio no poder tomarlas, amo a los Guajazos, odio no tocar, amo los Camel, odio los impuestos, amo a los Zombies, odio no ser uno, amo Family Guy, odio el paquete Yoo, amo a Muhammad, odio no saber tocarlo, me amo, sí me amo.

Total eso es a lo que quería llegar.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Una noche, esta noche, la noche.

Es como tener la garganta reseca, los pies fríos y las ganas menguadas. No recuerdo cuándo fue la última vez que escribí algo que me hiciera feliz, tengo que recuperar las ganas de plasmar mis pensamientos en un documento, seguir adelante con mis pasiones.

Hace un par de semanas tomé un bajo e hice un poco de ruido con los Guajazos, fue poco en realidad pero volví a sentir ese calor, el que sube por el estómago y hace que tus neuronas empiecen a burbujear en la cabeza, hay que retomar. En realidad, mi vida en este momento es feliz en términos generales, nada del otro mundo, me costó mucho trabajo volver al barco y en eso estoy.

Es necesario volver a lo básico a eso que me hacía soñar cada noche a eso que si bien recuerdo me hacía aguantar la semana para llegar al fin y explotar en un gozo pocas veces experimentado en la vida. Basta de quejarse de la vida que se tiene. Basta de la inconformidad que no lleva a sitio alguno. Es hora de volverse a enamorar.

Enamorarse de nuevo de las letras, de cada palabra lograda con el mínimo de esfuerzo y el máximo de corazón. El trabajo me robó eso y es hora de buscarlo de vuelta de reencontrarme con aquel al que le encantaba decantar palabras al por mayor.

Un texto cada dos meses, eso es lo que disfruto ahora y no puedo seguir así, debo retomar viejos textos que dejé en el olvido y que gritan dentro de mi cabeza cada noche para que los reinicie, para que los acaricie de nuevo.

Es hora.

viernes, 24 de julio de 2009

A quien escuche

Ahí estaba él, el General, sólo a un paso de morir a manos de las bestias y aun así intentaba atacarlas, peleó hasta el último aliento. Justo antes de convertirse en uno de ellos me dedicó una mirada y dijo: es tu turno. Paralizado de terror, sólo atiné a levantar la pala y con un aullido que me recordó a un perro atropellado dejé ir mi humanidad hacia la muchedumbre.

Después de algunos días en descomposición los Z adquieren una consistencia algo frágil, por lo que es muy fácil atravesarlos hasta con un palo de escoba, gracias a los días de entrenamiento en el Campo Marte tuve la oportunidad de aprender algo de ellos; un golpe seco en el cráneo apaga su sistema de inmediato, son extremadamente lentos y están imposibilitados para trepar o siquiera subir escaleras.

Pude aprovechar la ventaja de sus debilidades al hacer una tarea paciente y certera, golpe a golpe fui derribando a cada uno de los enemigos, claro, debía licuar sus cerebros a golpes, no sólo romper sus huesos o desmembrarlos, siempre existe la posibilidad de que uno quede aún pujante y busque tus pies, arrastrándose, para inmovilizarte. Es un error que sólo se comete una vez en la vida.

Al llegar al lugar en dónde mi padre murió y se reanimó titubee al asestar el golpe, aún infectado lucía como él; fuerte como un roble aunque con la mirada desquiciada por la sed de sangre, al estrellar la pala contra la base de su cráneo sentí que algo no estaba bien, algo faltó. Decidí no voltear atrás y seguir con mi labor.

Sólo quedaban un par de docenas de ellos para despejar el camino hacia la salida, del otro lado de la puerta estaba la caballería aguardando para llevarme a lo alto de la pirámide del Sol, un lugar que nos podría servir de bunker hasta que llegaran mejores tiempos. Al empezar la carga contra el último grupo sentí que algo tiraba de mi pierna, alcancé a distinguir el tacto de una mano fría rodeando mi tobillo, al fin lo comprendí, sé que es lo que faltó, lo que se me perdió al calor de la batalla.

No noté que al atacar a mi padre no percibí el sonido característico del hueso al romperse, ahora lo veo con una horrenda herida debajo del oído, ya no es mi padre es un Zombie, empieza a trepar por mi pierna desgarrándola, noto el vacío en sus ojos, no me reconoce, sólo quiere probar mi carne. Me levanté y corrí sobre mis pasos, ya es tarde para mí y lo único que encontré fue este radiotransmisor, transmito este mensaje a quien sea que esté escuchando, me queda muy poco tiempo y lo último que puedo decirles es que ahora es su turno. Sálvense.

miércoles, 15 de julio de 2009

Master *ding, ding* Master!

Amo a estos cabrones



El pianosaurio es lo mejor.

lunes, 15 de junio de 2009

Esas son chingaderas

Es una pena lo que ocurrió el domingo en el Autódromo de Puebla, cada hombre y mujer que se sube a un auto de carreras sabe que se arriesga a esto, sin embargo, hay algunos puntos completamente reprobables en lo que sucedió.

Si bien el contacto de Jorge Goeters fue el que hizo perder el control a Carlos Pardo, esta es una práctica muy común y corriente en este serial, vamos, podría asegurar sin temor a equivocarme que de eso se tratan estas pinches carreritas, así que Goeters sólo hizo una carrera más sin culpa alguna.

Lo que es una completa estupidez y falta al sentido común es que haya una contención de ese tipo en la parte interna de la pista, carajo, los autódromos mexicanos están más hechos a la fuerza que otra cosa. Por si el hecho de una contención tan mal puesta no fuera poco, ésta tenía las mismas medidas de seguridad que una ballesta cargada en una guardería. Este muro de concreto estaba cubierto por sólo un tambo de agua, no había llantas, más botes, nada, el trazado a la fuerza de ese óvalo tuvo mucho que ver en la muerte del piloto.

La jaula de seguridad sirvió para lo mismo que habría valido un conjunto de popótes más o menos bien afianzados. El auto se destrozó, muchos podrán argumentar que a esas velocidades (180 km/h aprox.) no hay vehículo que resista, perdón, pero NASCAR se debe asegurar de que los vehículos cumplan ciertas normas de seguridad sino veríamos más muertes en los seriales gringos que en un capitulo de los Happy Tree Friends. Tan sólo en la pista de Talladega en Nationwide han ocurrido accidentes a más de 300 km/h, el auto ha volado y se ha estrellado contra la contención a dos metros de altura para después caer y girar y girar por algunos metros, el auto al parecer queda deshecho, sin forma ni motor, pero la jaula de seguridad queda intacta y el piloto a pesar de presentar lesiones, sigue con vida.

Tardaron más de 12 minutos en sacar a Carlos del auto, esto simplemente no tiene madre.

En conclusión, esta no es una muerte que se deba a la falta de pericia, ni a los contactos entre pilotos que traen pique, se trata simplemente de un fallecimiento obrado por la ineptitud de algunos y sobretodo de esas personas que hacen las cosas “a la mexicana”.

Si hay un culpable es usted querido aficionado a Nascar, que no exige la retribución justa por el boleto que paga, seguiremos siendo público de segunda que ve morir a sus pilotos en la pista.

jueves, 11 de junio de 2009

Palabras mamonas

Las ciclópeas oleadas de mártires no dejan de golpear el arrecife de mi voluntad.

jueves, 4 de junio de 2009

Nos quedamos sin héroes

Ayer por la noche fue encontrado el cuerpo sin vida de Kwai Chang Caine, ese solitario monje vagabundo experto en el arte del Kung Fu que recorría Norteamérica en busca de paz para su atormentado espíritu.

Nos quedan algunos de los Almada y personajes secundarios como Van Dame y Seagal.



Al fin alguien mató a Bill.

!Que cocha!

Hoy desperté después de más de 12 horas de sueño y lo primero que llegó a mi mente fue:

Soy un buen hombre.

No sé si eso sea cierto pero al menos para mi es un poco atemorizante...

martes, 2 de junio de 2009

Chiles Del Fuerte.

Me pasé mucho tiempo fortificando mi existencia –encerrándola en un fuerte, no haciéndola más fuerte–, hay realmente pocas formas de saber de mí, de lo que hago, de quién soy. Y así debe quedarse.


Chales, hay rolas que me hacen querer no tener alma, o al menos no el timing para escucharlas cuando me estoy cagando.



lunes, 1 de junio de 2009

Otro haiku

Te ríes de él
Ya vomitó tus pies,
Un borracho es.

lunes, 25 de mayo de 2009

Reparadora de calzado Sarmiento

Ayer mi ociosidad me llevó a ponerle tapas a mis zapatos... ¡Yo mismo! no sabía que tenía habilidades de Shoemaker...

Si me cae que diiiii haaaaaambre no me muero, de pedo talvez pero por inanición no lo creo.

viernes, 22 de mayo de 2009

Bonito Haiku

En la soledad

La tormenta no llega,

Es la espera.

jueves, 21 de mayo de 2009

Hey ya!

Una rola que me sacó de una depresión en algún momento de mi vida. Esta es la versión acústica interpretada por un gordito que podría ser el resultado de combinar el esperma de Gordolobo y el mio.



Me deprime pero me gusta.

miércoles, 6 de mayo de 2009

Fotota de naco

Hace algunos años Alejandro Konstantonis impuso la moda de sacarse la foto de "naco" con los vehículos de prueba que las marcas nos proporcionan para hacer nuestra nada noble labor periodística.

En esta ocasión yo recurrí a la foto de naco porque este es el primer auto del que escribí en mi vida, lo hice cuando lanzaron el concepto en 2005-2006 y desde ese momento no he parado.

Obviamente como soy un pinche mamón pretencioso de mierda la foto de naco tenía que ser diferente, no es la típica imagen tomada de un monito recargado en un auto que no es suyo, vamos la imagen de un policía de tránsito sonriendo con un Ferrari Enzo Ferrari, es una foto mas como diaaaaaaarte.



El dedo es una tradición que obliga.



Un agradecimiento al buen Shoemaker por la sesión.

miércoles, 29 de abril de 2009

De mierda, pánico y rosas

Ya me cagó este desmadrito de la alerta sanitaria... pinche pánico de masas. Sí, ahí está el pinche virus, eso es un hecho, aunque no puedo evitar preguntar: ¿De qué nos distraen? ¿Qué ocultan?

La mierda termina por flotar...



Al tomar esta foto se me ocurrió uno de los arjonismos más bellos del poeta de aparador y versa así:

La espina es la esencia de la rosa, porque a pesar de su belleza, la rosa vive entre espinas.

Inmediatamente después me puse a cantar la de tiene espinas el rosal.



martes, 28 de abril de 2009

Niño Zombie

Un agradecimiento al Rich por zombificarme.

¿A poco no es tierno?

jueves, 23 de abril de 2009

Sin llaves (Update x 2)

Ayer me quedé sin llaves, creo que desde que inició este proceso temí ese momento, lo afronté bien, creo yo...

Una llamada a mi hermano y todo se solucionó para bien.

Me caga olvidar las cosas, no dejo de recriminarme, no quiero zombificarme.






Esta es una fotico tomada en Tulancindo el fin pasado.


Update.
Justo cuando subí la entrada me llegó esta foto por parte de Shoemaker (fotógrafo de la revista), creo que refleja a la perfección lo de odiarme a mi mismo.


Otro update.



Es una mala manía que tengo.

lunes, 13 de abril de 2009

Duh, duh, duh.

Excelente puentesote, el pedo es que me siento aún más madreado que antes...

lunes, 23 de marzo de 2009

El estado de las cosas

Pasos más, pasos menos sigo en el camino.

Un obituario sería más facil de desentrañar.

lunes, 2 de marzo de 2009

jueves, 26 de febrero de 2009

La vida en el túnel

Despierto y se que aun falta mucho trecho por recorrer, hay múltiples agravantes, el frío ha mellado mi entendimiento y mis ganas, a estas alturas extraño los rayos de luz abrazando mi cuerpo pero debo seguir, si desfallezco ahora no podré llegar al final del túnel.

La búsqueda se convirtió en un acto de supervivencia y es sólo en estos momentos en los que te das cuenta que tan útil es todo aquello que llevas en el bolsillo, sin unos cerillos puedes darte por muerto, sin un clip puedes simplemente morir de una infección, por supuesto que hay más, hay mucho más.

Debo seguir en línea recta aunque no vea una razón. Los constantes descansos en la cueva, me obligan a detener la marcha y reflexionar, es una constante necesaria, ya que si trato de salir en un solo respiro pueden existir consecuencias como la claustrofobia y la agorafobia, debo acostumbrarme al medio y hacerlo mío.

Ahora valdría la pena preguntarle a Alice si en verdad quiere ver qué tan profundo es el túnel del conejo. El cansancio me obliga a parar una vez más, en esta ocasión hay que desentrañar la incógnita ¿por qué el final es en donde partí?

Lo que dice abajo

"¡Pa la mujé que se va

siempre hay fundía una bala

o una argoya o un puñá¡"

lunes, 23 de febrero de 2009

Excelente fin

Bueno, ya se terminó la pachichez y es hora de empezar a cumplir objetivos, por lo pronto me siento con el ánimo de hacerlo, asi que a darle.

El camino es largo, pero no interminable.



My eyes are blind, but i can see

viernes, 20 de febrero de 2009

De cuando las cosas cobran sentido

Hace chingos de años (si por "chingos" entienden 15), yo no paraba de escuchar una canción de Anthrax llamada Poison My Eyes, la reproducía una y otra vez en mi Walkman, se trataba de un cassette original del soundtrack de la película el Último Gran Héroe propiedad del la Chuleta.

Hace un par de semanas la volví a escuchar y la letra cobro tanto sentido que no pude evitar reir y reir durante horas.

Poison My Eyes

I always knew I had what it took
To jump over any obstacle
Together or
separate we've been through
Fight for me and I'd kill for you
I always
knew things were the same
But there's a caution light in your brain
I
won't help with your cement shoes
If bailing out is what you
choose

You've been spending years and years
Carryng your biggest
fears
Too long ,Too long
You've been sucked in through a hole
With
your vision of control
So wrong, So wrong
If you leave your defences
down
Who'll chew you up and spit you out
If you leave your defences
down
Who will pick you up

Poison my eyes
Better men have
tried
Tried to take me down
A man is a man is a
Man you can't see
clear
Now your forced to hear
All that you dread
Better to keep it
hidden
Beleiving it's what you deserve

You make me feel everything I
do
Betters me and sabotages you
But all it does is leave you behind
As
you disconnect from the grind
Drowning in your own denial
Is as simple as
a smile
One is strong one insecure
Who dies first in our private
war

You've been wasting years and years
Running from your darkest
fears
Too long, Too long
You've been falling through the holes
Now
your vision of control
Is gone, Is gone
If you leave your defences
down
Who'll chew you up and spit you out
If you leave your defences
down
Who will pick you up

jueves, 19 de febrero de 2009

De gansos y sueños

En el lago de las ánimas habita un ganso que, según cuenta la leyenda, al ser atrapado hará tus sueños realidad. Muchos dicen que no existe, que es tan sólo un cuento de niños y que si vas a su búsqueda terminarás perdido en medio de la nada. Hasta el momento no se sabe de alguien que haya intentado encontrarlo.

Ese ganso será mío, lo encontraré y hará mi deseo realidad: quiero tener un ganso mágico para mi solo y pedirle a diario que se muera y deje de engañar a la gente.





Siento un odio malsano por las aves.

martes, 17 de febrero de 2009

El telegrama de Cthulhu

“En la oscuridad, justo en el fondo de la bahía de Tsolzer yacen los restos fosilizados de una bestia mítica, una de las mascotas de los dioses el Al-zahaera, vigía del abismo. Fue desterrado del reino después de devorar vilmente al primer humano.

Poco después de su infamia, aquel que no puede ser nombrado, vio su fin a manos de sus propios amos. Después de ser torturado fue lanzado al vacío como una advertencia para todo aquél que intente detener los esfuerzos por crear la nueva raza.

El grotesco cadáver de Al-zahaera se hundió gracias a una enorme cadena con el peso de 5 montañas con la siguiente inscripción: Por mi mano se ha de dar inicio y el fin llegará de la misma forma.

Al parecer han pasado eternidades desde la caída del sabueso y justo ahora viene el fin.”

Esta es la interpretación de un montón de jeroglíficos tallados en un monolito de piedra que data del año 380 a.C., descubierto en el fondo del mar en algún sitio al este de las Bahamas.




Lo quiero y lo quiero ¡ya!





Viene con sus víctimas y toda la cosa ¿no se lo comen?

martes, 10 de febrero de 2009

Zombies in mirror may be closer than they appear

Ayer vi el closet vacío y por primera vez entendí lo que estaba pasando. Sé que para ti debe ser poco a poco. Mi proceso es diferente, yo debo arrancar todo de un solo tirón y de forma limpia. No digo que sea más efectivo, ni menos doloroso, pero es la única forma que conozco.

Pasando a otro orden de ideas:

Tengo que escribir un par de letras para Los Guajazos y creo que es el tiempo indicado para hacerlo, van a ser viscerales, una verdadera bofetada a la cara de la virgen.

Las sombras forman bestias salvajes que esperan para verte pagar.

Pronto más detalles.

Ayer.

Nuevo libro.
Nuevo piercing.
Putos tatuajes salen más caros que un hijo estúpido en Harvard.



Y de pronto despiertas y te das cuenta que no estás tan solo.

sábado, 7 de febrero de 2009

De cuando te va de la verga y aún así te ríes.

En un día de lluvia, lo mejor que puedes hacer es sonreir y recibir el líquido con agrado, pues es él quien en realidad da la vida, o la quita dependiendo de lo hijos de la chingada que podamos ser. Por lo pronto creo que a mi solo me mojará. Espero continuar asi.

martes, 3 de febrero de 2009

Al despertar

Cuando abrí los ojos esto fue lo que salió de mi boca:

No, ellos no deben salir tan jóvenes, sólo tienen 13 años. Después irán a bares y se besarán, terminarán amándose más de lo debido.



Joe Hallenbeck es la onda.



Satan Claws se hace cada día más fuerte.



viernes, 30 de enero de 2009

No te me acalambres ñero

Hay veces que uno (no uno sólo sino uno de acá, yo) pasa por momentos difíciles y se pregunta ¿Qué hago para aminorar el daño? ¿Cómo me saco tanta mierda neuronal? ¿Cuántas putas caben en la carpa Astros sabiéndolas acomodar? ¿Qué haría Mauricio Garcés en mi lugar?
Al no encontrar respuestas a estas interrogantes uno (je, je, je) decide simplemente abrir un blog…

No esperen grandes cosas, es sólo por el ánimo de retomar la maquila de letras.


Y de pronto despiertas y ya nada es lo mismo. Yo no soy el mismo.